Los vecinos exigen al Gobierno vasco "pasar de las previsiones a los hechos"
6 de Mayo de 2010
Getxo. La Agencia Vasca del Agua (URA), organismo dependiente del departamento de Medio Ambiente del Gobierno vasco, aseguró ayer a los vecinos de Neguri afectados por las inundaciones del río Gobela, en Getxo, que el derribo del primer puente en la zona, incluido en las obras urgentes de encauzamiento y acondicionamiento hidráulico y ambiental del río, se llevará a cabo en junio. Los vecinos, que se habían quejado del retraso del proyecto, constataron que se ha modificado el plan de obra inicial y exigieron al Ejecutivo López "pasar de las previsiones a los hechos".Representantes de la Asociación de Afectados por el Río Gobela se reunieron ayer con representantes de URA en Bilbao y el director de la agencia, Iñaki Urrizalki, a la cabeza. El grupo había criticado recientemente "el lento avance" de los trabajos urgentes de mejora del río Gobela en el tramo Etxezuri-Larrañazubi, cifrados en 4,6 millones de euros, ya que "se acerca el segundo aniversario de las fatídicas inundaciones y el río presenta los mismos problemas hidráulicos de entonces".
Las obras prevén la demolición y nueva construcción de los puentes de Leioa y Jolaseta, así como la excavación y vaciado de zonas anexas a la margen izquierda del cauce. Tras confirmar la existencia de "un déficit de información" y que "el plan de obra se ha modificado y actualizado", el presidente de la asociación, Kike Prada, confirmó a DEIA que la demolición del primero de los puentes, el de Jolaseta, "el que mayores problemas presenta", tendrá lugar "en la primera quincena de junio". Así, el derribo de este puente, está ubicado junto a la ikastola Gobela, se solapará en el tiempo con el del viaducto de Los Puentes, en Salsidu. El plan de URA prevé proseguir con la demolición del segundo puente, el de Leioa, en julio, coincidiendo con la excavación de los terrenos para ampliar el cauce del río. "Hasta junio, sólo se realizarán tareas de desvío de servicios", indicó Prada.
Desde la asociación, que califica como "positiva" una reunión que sirve para "reconducir desencuentros", se constata que los cambios introducidos en el plan de obra "nos permiten ver las cosas de una forma mucho más objetiva en cuanto a plazos y trabajos". El grupo vecinal sigue asegurando que estas obras "sólo atenúan en parte el riesgo de inundación en determinadas zonas de la ribera del río", por lo que se exige la ejecución del plan global de obras y que el Gobierno vasco y la Diputación de Bizkaia "garanticen la seguridad y el bienestar de los ciudadanos que vivimos con esta amenaza de inundación sobre nuestros hogares".
Cortes de agua Los trabajos previos a la demolición del puente del área de Salsidu, que lleva a cabo URA y están más avanzados, obligan a trasladar dos importantes válvulas que dirigen el suministro de agua al barrio de Aldapa, los edificios situados en el Polígono Rojo y el Polígono Blanco, así como a la totalidad de las viviendas de Berango. Este traslado obligará a realizar dos importantes cortes en el suministro de agua a estas zonas afectadas. La suspensión del suministro de agua a estos vecinos se realizará en horario nocturno, desde las 23.00 horas de hoy, jueves, a las 05.00 horas de mañana. El lunes, el corte afectará únicamente a Aldapa y se producirá entre las 9.00 y las 15.00 horas.
Por otra parte, la próxima semana se instalará la iluminación de la pasarela peatonal provisional colocada en los aledaños del puente de Salsidu, tras la petición que en ese sentido le ha presentado el Ayuntamiento de Getxo a URA. Esta pasarela se ha instalado en la zona para comunicar las dos márgenes del río y forma parte del proyecto de derribo del puente de la zona, que se ejecutará a principios de junio. La contrata BYCAM se hará cargo de los costes de la iluminación de la pasarela provisional de Salsidu, que facilitará el tránsito de los vecinos durante el periodo nocturno.
Neguri observa con "alarma" el "lento avance" de la canalización del Gobela
Los vecinos critican a Lakua porque los problemas de inundabilidad persisten
21 de Abril de 2010
Getxo. Mientras los trabajos en la zona de Salsidu avanzan a buen ritmo, la Asociación de Afectados por el Río Gobela mostró ayer su "alarma" por el retraso de la obra de canalización en el área de Neguri-Lexarreta, donde los vecinos aseguran que no se están cumpliendo los plazos dados por la Agencia Vasca del Agua (URA), dependiente del Gobierno vasco, para reducir la inundabilidad del cauce. "Se acerca el segundo aniversario de la inundación y los problemas persisten en el río", denuncian.Los vecinos de Neguri enviaron ayer una carta al director de URA, Iñaki Urrizalki, en la que muestran su preocupación por "el lento avance" de las obras para la mejora hidráulica del tramo Etxezuri-Larrañazubi, cifradas en 4,6 millones de euros, ya que "se acerca el segundo aniversario de las fatídicas inundaciones y el río presenta los mismos problemas hidráulicos de entonces".
Los vecinos aseguran que "se ha superado ampliamente el plazo de dos meses solicitado y en la zona no hemos visto más que tímidos movimientos" relacionados con el desmontaje de los campos de fútbol, algún trabajo de cata y el emplazamiento de los servicios necesarios.
"Empezamos a alarmarnos viendo deshacerse nuestras esperanzas de una pronta solución a la constante amenaza que supone el río", recoge la carta, en la que contraponen la situación en Neguri con la de Salsidu. "Mientras allí la situación es ilusionante y esperanzadora el hecho de que el puente se prevea derribar este próximo lunes, en Larrañazubi-Neguri la situación es desesperante", critican.
Los vecinos recuerdan que estas obras, "que han perdido el calificativo de urgentes y ahora se llaman anticipadas", ya habían acumulando muchos retrasos. La primera fecha para su ejecución fue junio de 2009. Finalmente, se "iniciaron" en enero de este año. La asociación asegura que URA no reconoce estas demoras y que no ha respondido a sus peticiones de información sobre el plan de obras, que incluyen la demolición y nueva construcción de los puentes de Leioako y Jolaseta, así como la excavación y vaciado de zonas anexas a la margen izquierda del cauce.
La asociación solicita a URA que explique las razones del retraso y que facilite un plan de obra "actualizado y detallado", para tener "cumplida información de los plazos y previsiones". También se exige que la empresa TRAGSA, encargada de los trabajos, incremente los medios técnicos y humanos, para "recuperar el tiempo perdido de manera que nos permitan enfrentarnos a los meses más problemáticos desde el punto de vista pluviométrico con mejoras evidentes en el comportamiento hidráulico del río". También piden ir más allá de las obras urgentes y dar los pasos necesarios para la tramitación de la totalidad del proyecto de mejora.
Los vecinos piden datos sobre el Gobela
Solicitan que se reúna la Comisión de Inundaciones para conocer el progreso de las obras en el río
Getxo. Concluido el periodo electoral y tras conformarse el nuevo Ayuntamiento, la Asociación de Afectados del Río Gobela vuelve a la carga para solicitar la convocatoria de una reunión urgente de la Comisión de Inundaciones. Su objetivo es evaluar el estado de las obras urgentes que se están ejecutando en las márgenes del río. Los vecinos creen que falta información por parte de la Agencia Vasca del Agua (URA), dependiente del Gobierno vasco, y que reconoce "retrasos" y exigen la recuperación ambiental de las áreas cercanas al río tras la conclusión de los trabajos.Los vecinos confirmaron ayer haber solicitado una convocatoria de la Comisión Especial de Inundaciones -entidad en la que están representados los afectados por las crecidas del río-, la Corporación local y URA. "Entendemos que la nueva composición del Ayuntamiento, la falta de información concreta sobre los proyectos por parte de URA y la necesidad de consensuar objetivos, hace más que necesaria la convocatoria de la comisión", explican los afectados.
La semana pasada se cumplió un año de la última crecida del Gobela, que tuvo lugar el 16 de junio de 2010 y volvió a resucitar viejos fantasmas -recuerdos habituales cada vez que llueve con fuerza desde la inundación de 2008- entre los habitantes cercanos a su cauce. A día de hoy, la asociación denuncia que sigue existiendo "riesgo de inundabilidad" y que las obras que se han realizado hasta la fecha son "buenas, pero insuficientes" aunque hayan logrado rebajar el cauce unos 90 centímetros.
Desde URA informaron a DEIA que tras finalizar la actuación en Salsidu, hace ya varios meses, se están ultimando los trabajos en el entorno de Larrañazubi-Etxezuri. En esta área, "la mejora hidráulica está ya conseguida", explican desde la agencia, que confirman que las obras del puente Jolaseta, el situado junto a la ikastola Gobela, han concluido tras las pruebas de carga y el repintado de líneas. Los vecinos ya pueden cruzarlo a pie. Según URA, su apertura al tráfico rodado depende de "los pertinentes permisos de apertura", al parecer ligados a la conclusión de las obras de canalización de servicios y saneamiento del entorno, al igual que en el caso del puente Leioa. URA ha anunciado que se están produciendo cortes intermitentes de circulación en la calle Elkano debido a las obras de canalización.
La que algunos afectados conocen ya como "la obra del Escorial" -trabajos de urgencia que incluyen un doble cauce en el río y la creación de puentes nuevos en Salsidu y Neguri Langile- se está dilatando más de lo esperado. Desde URA reconocen los retrasos, calificados como "imprevistos y de fuerza mayor". La agencia reconoce también que la situación "es mejorable" y que la obra podría estar más avanzada. "Ha habido retrasos, todos perfectamente explicables debido a condicionantes medioambientales; resoluciones de la administración competente, en este caso la Diputación; la meteorología, que ralentiza el ritmo de obra en caso de lluvia o la paraliza, o imprecisiones del proyecto original", señalan las mismas fuentes.
Fuente: deia..com
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